
Aislamiento térmico del hogar – ventanas
El aislamiento térmico del hogar tiene una gran influencia en nuestra sensación de confort ya que nos permite mantener una temperatura adecuada y agradable tanto en invierno como en verano. Además, puede suponer un ahorro energético equivalente a unos 400 euros al año en la factura de la luz. Descubre en este post cómo puedes conseguir un óptimo aislamiento térmico de tu casa a través de las ventanas.
El aislamiento en ventanas
Las ventanas son la principal vía de entrada y salida de calor en casa. Dado que su mal aislamiento tiene un impacto negativo en la factura de la luz y que el coste de modificar la situación es modesto, recomendamos empezar la mejora del hogar hacia un buen aislamiento por esta parte.
El aislamiento térmico se mide con el factor de transmisión térmica (factor U). Este factor mide el intercambio de temperatura que se produce entre el exterior y el interior del hogar. Cuanto menor sea el valor U, mayor será el aislamiento térmico. En lo que se refiere a las ventanas, son dos los elementos críticos que influyen en la capacidad de aislamiento: el marco y el cristal.
El marco de la ventana
Los materiales disponibles para el marco de la ventana son el aluminio, el PVC y la madera. En cuestión de aislamiento térmico, el que ofrece mejor resultado es el PVC, proporcionando el mayor ahorro en energía. La madera también es un aislante natural y, por lo tanto, una alternativa excelente. Sin embargo, aunque el coste inicial de la ventana de madera sea menor, hay que tener en cuenta que los costes de manutención son bastante elevados. Encontramos también los marcos de aluminio con rotura de puente térmico. En este tipo de perfiles, entre la parte interior y exterior, se pone un material aislante, como la resina o la poliamida, que evita el intercambio de frío y de calor. A pesar de que este sistema mejora la eficiencia energética, no alcanza el nivel de aislamiento térmico del PVC.
El cristal de la ventana
Aunque el material del marco es importante, es el tipo de vidrio que escojas lo que tendrá un impacto relevante en el consumo final de energía. En este sentido, la colocación de ventanas con doble o triple acristalamiento es una alternativa muy recomendable para contribuir positivamente a la sostenibilidad y eficiencia energética de tu casa.
Las principales características a observar a la hora de escoger el cristal es el grosor del vidrio (cuanto más espesor, mayor será la capacidad de aislamiento) y la distancia entre los cristales. En estos momentos, se considera que 16mm es el espacio óptimo para el aislamiento. Partiendo de estos factores, ¿qué opciones encontramos en el mercado?
Tipos de cristal ventana
– Simple: es el vidrio que se usa habitualmente para ventanas de doble cristal y proporciona un aislamiento básico. A pesar de tener un precio muy competitivo y muy buena capacidad de aislamiento, en cuestiones específicas, como el puente térmico, no es un vidrio muy eficaz.
– Bajo emisivo: es ideal para regiones con inviernos muy fríos y veranos suaves y para ventanas orientadas hacia el norte. Este tipo de vidrio es excelente conservando el calor y evitando que salga el frío (con el ahorro en calefacción que eso conlleva). También destacan por su capacidad de reducir los niveles de condensación y de rechazar la radiación infrarroja. Aunque aísla mejor que el vidrio simple, el bajo emisivo no impide la entrada de calor. Para ello, es recomendable el cristal bajo emisivo con control solar.
– Control solar: el vidrio perfecto para climas cálidos con inviernos suaves por su capacidad de evitar un sobrecalentamiento del interior de la vivienda. Aunque se trata de un cristal muy eficaz a la hora de reducir los gastos en aire acondicionado, deben usarse sólo en determinadas ocasiones debido a que reducen la entrada de luz exterior.
Como has visto en este post, un buen aislamiento térmico influirá positivamente en la factura de la luz y el gas de tu hogar. Además, reducirás el consumo de energía y disminuirás las emisiones de dióxido de carbono a la atmosfera. Empieza por las ventanas y consigue una casa más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.